mayo 22, 2014

LA PROGRMACIÓN DEL ARGENTINO "B" DE FÚTBOL

LA ACTIVIDAD DE ESTE FIN DE SEMANA

Así se jugará el ARGENTINO B DE FÚTBOL este fín de semana de acuerdo al sitio ASCENSO DEL INTERIOR:



TORNEO ARGENTINO B

Semifinales - Partidos de Ida


VIERNES 23
 
**RACING  CÓRDOBA vs. **AT. PARANA PARANA 23/05/2014 20:00 Arbitro GONZALEZ MARIANO RAMON SANTA FE Asistente 1 MASIELLO GUILLERMO SANTA FE Asistente 2 MOYA MAXIMILIANO SANTA FE


 
SABADO 24

**UNION SUNCHALES vs. **UNION V.KRAUSE SAN JUAN 24/05/2014 16:00 Arbitro QUINTEROS JULIO CÓRDOBA Asistente 1 GONZALEZ JUAN PABLO CÓRDOBA Asistente 2 ANTONUTTI DANIEL CÓRDOBA

              
**ESTUDIANTES R.C. RÍO CUARTO vs. **INDEPENDIENTE CH. CHIVILCOY 24/05/2014 18:30 Arbitro GOMEZ LUCAS SAN PEDRO Asistente 1 SENA RICARDO SEBASTIAN SAN NICOLÁS Asistente 2 BARRA RODRIGO EMMANUEL SAN NICOLÁS

              
**SAN LORENZO ALEM CATAMARCA vs. **DEP. MADRYN PTO.MADRYN 24/05/2014 18:30 Arbitro PREZIOSA OSVALDO SEBASTIAN SAN JUAN Asistente 1 BASUALDO JAVIER SAN JUAN Asistente 2 DIAZ JOSÉ  ALBERTO SAN JUAN

              
**ALTOS H. ZAPLA PALPALA vs. **G. Y ESGRIMA MZA MENDOZA 24/05/2014 20:30 Arbitro BEJAS NELSON MATIAS TUCUMÁN Asistente 1 HERRERA ALDO DANIEL TUCUMÁN Asistente 2 MANSILLA DANIEL TUCUMÁN

 
LUNES 26
**CAMIONEROS GRAL.RODRIGUEZ vs. **UNION ACONQUIJA  26/05/2014 15:30 Arbitro NOVELLI SANZ LUCAS ARIEL TANDIL Asistente 1 GONZALEZ VICTOR HUGO TANDIL Asistente 2 NOVELLI DIEGO SAUL TANDIL

LA PROGRAMACION DEL ARGENTINO "A"

LO QUE HAY QUE SABER DE LAS SEMIFINALES

Este sera elprogrma de partidos en SEMIFINALES del TORNEO ARGENTINO "A" DE FÚTBOL de acuerdo al sitio ASCENSO DEL INTERIOR:



TORNEO ARGENTINO A

Semifinales - Partidos de Ida

SABADO 24
*TIRO FEDERAL ROSARIO vs. *GUARANI A. F. POSADAS 24/05/2014 11:00 Arbitro MONTERO  ARIEL GUSTAVO * TUCUMÁN Asistente 1 SAGER EDGARDO IVAN * VICTORIA Asistente 2 ASCENSI MARIANO *  EZEQUIEL  ESCOBAR



DOMINGO 25
*J. U. UNIVERSITARIO SAN LUIS vs. *C.A.I. CDO RIVADAVIA 25/05/2014 20:00 Arbitro GALLO DIEGO OMAR * VILLA MARÍA Asistente 1 ARREGUES CRISTHIAN * ONCATIVO Asistente 2 VIALE MARIANO SEBASTIAN * CÓRDOBA.  La revancha seria el Jueves 29 - 15:00 Hs.


FINALES LUNES 02/06/2014 Y SABADO 07/06/2014

LO QUE HAY QUE SABER DE LA SELECCION ARGENTINA

EL CRONOGRAMA DE TRABAJO

Este es el CRONOGRAMA DE TRABAJO de la SELECCION ARGENTINA dado a conocer desde el sitio oficial de AFA :




LA ACTIVIDAD DEL FIN DE SEMANA

LA PRIMERA "D" EN INSTANCIAS DECISIVAS

Asi se jugaran los partidos revanchas de LA PRIMERA "D" de acuerdo al sitio oficial de AFA :



Semifinales - Partidos de Vuelta

Domingo 25 de mayo

15.00-- San Martín-Yupanqui, árbitro: Gonzalo Beloso


15.00-- L.N. Alem-Juventud Unida, árbitro: Edgardo Kopanchuk



De conformidad con las disposiciones enunciadas en el Reglamento del Campeonato de  Primera División “D” 2013/2014, si al término de alguno de los segundos partidos señalados precedentemente, la cantidad de puntos y la diferencia de gol resultaran igualadas, la definición se operará mediante la ejecución de tiros desde el punto penal.

LA ACTIVIDAD DEL FIN DE SEMANA

LA PROGRAMACIÓN DE LA PRIMERA C 

Así se jugaráeste fin de semana una nueva fecha de LA PRIMERA C., de acuerdo al sitio oficial de AFA:



Primera C, fecha 38
 
Viernes 23 de mayo

15.30-- J.J. Urquiza-Sportivo Italiano, árbitro: Sebastián Zunino


15.30-- Defensores Unidos-Dock Sud, árbitro: Juan Ledo


15.30-- Argentino de Quilmes-Argentino de Merlo, árbitro: Cristian Cernadas


15.30-- Sacachispas F.C.-Deportivo Español, árbitro: Cristian Suárez (en Gral. Lamadrid)


15.30-- F.C. Midland-Berazategui, árbitro: Rodrigo Pafundi


15.30-- San Telmo-Central Córdoba (Rosario), árbitro: Antonio Amato (en Brown de Adrogué)


15.30-- Deportivo Laferrere-Liniers, árbitro: Mauro Biasutto


15.30-- Luján-Defensores de Cambaceres, árbitro: Sebastián Bresba


15.30-- Talleres (R.E.)-Ituzaingó, árbitro: Damián Rubino



Domingo 25 de mayo

15.30-- Excursionistas-General Lamadrid, árbitro: Rodrigo Sabini (en Nueva Chicago)

LA ACTIVIDAD DEL FIN DE SEMANA

ASÍ SE JUEGA LA PRIMERA B METROPOLITANA

Esta será LA PROGRAMACION DE LA B METROPOLITANA para este fin de semana según el sitio de AFA:



Primera B, fecha 42

Sábado 24 de mayo
13.05-- Nueva Chicago-Comunicaciones, árbitro: Eduardo Gutiérrez (TV)


15.30-- Acassuso-Estudiantes, árbitro: Lucas Di Bastiano (en UAI Urquiza)



Domingo 25 de mayo
11.00-- Platense-Deportivo Armenio, árbitro: Ángel Bracco


11.30-- Chacarita-Temperley, árbitro: Pablo Dóvalo


15.30-- Barracas Central-Atlanta, árbitro: Julio Barraza (TV)


15.30-- Flandria-Deportivo Morón, árbitro: Ignacio Lupani


15.30-- Los Andes - UAI Urquiza, árbitro: Germán Bermúdez


15.30-- Villa Dálmine-Colegiales, árbitro: Carlos Stoklas


15.30-- Deportivo Merlo-Fénix, árbitro: José Carreras


 


Lunes 26 de mayo

15.30-- Almagro-Tristán Suárez, árbitro: Gastón Meineri

UN SABADO A TODO FÚTBOL

LA DEFINICION EN PRIMERA

Así sera la definicion el SÁBADO del FÚTBOL DE PRIMERA DIVISION de acuerdo al sitio de AFA que aqui comparto con mis lectores:



Copa Campeonato de Primera División 2013/2014

Sábado 24 de mayo

21.15-- San Lorenzo-River Plate, árbitro: Néstor Pitana (en estadio Juan G. Funes, San Luis)


De conformidad con las disposiciones enunciadas en el Reglamento del Campeonato de 1ra. División 2013/2014, en caso de igualdad al cabo de los 90 minutos señalados precedentemente, se jugará un tiempo suplementario de treinta minutos, en dos períodos de quince minutos cada uno, y de subsistir la igualdad, la definición se operará mediante la ejecución de tiros desde el punto penal (art. 111 R.G.).


Primera División, desempate por el 3er. Descenso


Sábado 24 de mayo

14.00-- Colón de Santa Fe-Atlético Rafaela, árbitro: Diego Abal (en Rosario Central)

De conformidad con las disposiciones enunciadas en el Reglamento del Campeonato de Primera División 2013/2014, en caso de igualdad al cabo de los 90 minutos señalados precedentemente, se jugará un tiempo suplementario de treinta minutos, en dos períodos de quince minutos cada uno, y de subsistir la igualdad, la definición se operará mediante la ejecución de tiros desde el punto penal (art. 111 R.G.).

NO SE GUARDO NADA

GONZALO BONADEO DISPARO CON TODO

En una ENTREVISTA realizada por la revista PAPARAZZI, GONZALO BONADEO no se guardó nada y habló de todo.-



Aqui lo más importante extraído del sitio 442.PERFIL.COM:

¿Qué mitos sobre el fútbol deberían derribarse?
-Que en el fútbol hay códigos. En el fútbol los códigos no existen.


¿En qué jugador se podría corporizar Dios?
-En Maradona. No quiero quitarle a Dios la chance de tener una imagen terrenal con todos sus defectos, sin dejar que siga siendo Dios, y esa imagen la corporizo en Diego.


¿En qué le duele mucho gastar dinero?
-Me rompe soberanamente las pelotas pagarles con mis impuestos el sueldo a los periodistas de Fútbol para todos.



Si hoy fuera adolescente, ¿qué pósters pegaría en las paredes de su cuarto?
-Uno de Roger Federer y otro de Lionel Messi. A los quince ya no era religioso, así que el del papa Francisco no lo tendría. En cuanto al rock, hoy no veo nada que se asemeje a lo que siempre me gustó.



¿En qué está para dictar cátedra?
-En deporte y en periodismo aplicado al deporte. Con el paso del tiempo advertí que con el tema de los Juegos Olímpicos logro hacer algo que no creo que otro sea capaz de hacer.




¿Qué posibilidades concretas tiene la Selección de ganar el próximo mundial de fútbol?
-La última chance que tiene la Argentina de pasar los cuartos de final es con un buen Messi, y si tiene un buen Messi puede ser campeón del mundo.


¿Quiénes pudren al fútbol?
-Los máximos culpables son los barrabravas y los dirigentes, le siguen los hinchas, los jugadores y los periodistas, que no ayudamos a mejorarlo.



¿Es posible terminar con la violencia en el fútbol?
-Eso es imposible



La pelota, ¿no se mancha?
-Sí. La pelota está mugrosa y tiene manchas indelebles.



¿Con qué ojos mira a los barras?
-Con ojos de desprecio. Mi único límite con ellos es que no soy valiente. No me gusta la violencia física. Por mí, que les pase lo peor.

DE CARA AL PRÓXIMO TORNEO

LOS NOMBRES QUE SUENAN EN BOCA

Este es un informe del sitio "EL GRAFICO DIARIO" sobre los nombres que tendría Boca en carpeta para el próximo torneo:



En el arco, a sabiendas que Agustín Orión tiene deseos de irse, sonó Cristian Campestrini, de Arsenal, aunque Mauro Bianchi haya desmentido los contactos. 



Para la defensa hay dos apellidos dando vueltas por la Ribera: Samuel y Casco. El zaguero, con pasado en el Xeneize multicampeón del Virrey, finalizó su contrato con Inter (Italia). Walter ahora busca club y la idea de volver a vestir la camiseta azul y oro lo tienta. 



El otro, Milton Casco, le interesa al DT para ocupar el lateral izquierdo con un hombre que tenga características más ofensivas, además el hombre de Newell’s Old Boys maneja las dos piernas, algo que seduce al entrenador. 



Para hacer la banda otro nombre que sonó con fuerza es el de Julio Buffarini, de San Lorenzo de Almagro.


En el mediocampo únicamente sonó Gonzalo Castellani, de Godoy Cruz, pero cayó en la consideración cuando desde Godoy Cruz pidieron tres millones de dólares por su pase. La mayor danza de nombres se dio en la delantera



Juan Manuel Martínez, Emanuel Gigliotti y Claudio Riaño no cumplieron con las expectativas, por lo que ahora serían usados como moneda de cambio para permitir el arribo de alguna figuras. Se evaluó la posibilidad de ceder al Burrito a Vélez para, pagando una diferencia de 500 mil dólares sumar a Mauro Zárate.




Hernán Barcos, hoy en Gremio y con contrato vigente, reconoció contactos con algunos allegados a Boca y se entusiasmó con la oferta pero no lo volvieron a llamar. 



Darío Cvitanich es otro que interesa. Con pasado en el Xeneize y presente en Niza, el ex Banfield fue ofrecido y Bianchi no lo descartó. Al jugador le interesa volver, decisión en la que pesa la intención de su mujer y para que la hija de ambos pueda crecer en familia. 



Otros nombres que el Virrey anotó en su lista fueron Gonzalo Bergessio, por quien ahora surgió un interés de Roma, e Ignacio Scocco, sin continuidad en el Sunderland inglés.

LA MIRADA DEL DÍA

LA FANÁTICA DEL JUEVES


HISTORIAS DEL DEPORTE QUE MERECEN SER CONTADAS

EL PROTAGONISTA DE HOY: "OSCAR RINGO BONAVENA"

Hoy secumple un nuevo aniversario de la muerte de OSCAR "RINGO" BONAVENA por ese este homenaje en "UNA CARICIA AL ALMA".-



El texto pertenece a LA REVISTA EL GRAFICO que aquí comparto con mis lectores:

21|5
 
MEDIANOCHE. SE AVECINA TORMENTA EN RENO, NEVADA.
Aquel viernes 21 de mayo de 1976, Don Chargin, poderoso empresario de boxeo que estaba a cargo del estadio Olympic, en el East Los Angeles, había tenido una conversación telefónica con Oscar Bonavena, que se hallaba en Reno. “Tenemos planes para ponerte en la cartelera del 15 de junio en Nueva York, Oscar. Podrías pelear con Howard Smith. Lo más importante es que, en la de fondo, van a pelear George Foreman y Joe Frazier, así que todo el mundo va a ver ese show”.



 La respuesta del boxeador fue inmediata: “Sólo espero que la bolsa sea buena. Aquí en Reno me prometieron una pelea con Ken Norton y no pasó nada. Ganarle a Billy Joiner hace un par de meses no me sirve, porque quiero rivales grandes. La idea me gusta. De todas formas, me estoy volviendo para Buenos Aires. Espero su llamada”.
Sin embargo, las apariencias engañaban. O al menos engañaron al promotor. Bonavena no estaba tan tranquilo ni tan seguro. 



“Ese viernes 21, Oscar me llamó; se le notaba muy preocupado –recuerda Dora Raffa, su viuda-. Es más: me rogó para que rezara por él. Me dijo que iba a tomar el avión el día de mi cumpleaños –yo cumplo el 23 de mayo- y que llegaría el lunes 24: quería ver por la tele una pelea de Muhammad Ali (Nota de redacción: efectivamente, el 24 de mayo Alí venció a Richard Dunn por KOT en 5 en Munich, Alemania). 




Pero me aclaró que antes tenía una cosa que arreglar y que no le avisara a nadie, y mucho menos a sus hermanos, porque no quería preocupar a su gente. Por esa época solía llamarme hasta tres veces a la semana y siempre mandaba tarjetas, que hablaban de Dios y de nuestro amor. Estábamos separados, sí, pero siempre mantuvimos el vínculo”. Dora muestra algunas tarjetas que ha guardado celosamente: “Muerto, estaré enterrado dentro de ti”, dice una, escrita con trabajosa letra, casi infantil. 




Razones tenía para estar mal. Apenas una semana antes, unos desconocidos habían ingresado al trailer donde vivía, en el lote de Lockwood. “Quedó una gran mancha negra en el suelo, donde hicieron la hoguera –contaría, tiempo después, la esposa del administrador del lugar, Barbara Wellington, a Alberto Oliva, corresponsal de El Gráfico en Estados Unidos-. 




Nosotros estábamos afuera de la ciudad. Bonavena declaró ante el sheriff que entre otras cosas, le quemaron el pasaporte, la tarjeta de residente y otras pertenencias personales. Era un tipo simpático y conversador. Eso sí, no sé de dónde pudo haber sacado los 10 mil dólares que cuesta ese trailer, porque no parecía estar lleno de plata, justamente. Este es un pueblo chico y todo se sabe...”.





Ese viernes, 21 de mayo, Oscar Bonavena salió -como hacía casi todas las noches-, en su Montecarlo marrón claro, rumbo al casino Harra’s, a jugar unos dólares. Cuando llegó, ya era pasada la medianoche. No sabía que unas horas después iba a yacer muerto, de un balazo en el corazón.





01|2
 
BONAVENA LLEGA A RENO Y SUEÑA CON UNA REVANCHA ANTE ALI.
Cuando llegó a Reno, el primero de febrero del 76, Oscar Bonavena tenía firmado un contrato con José Montano, promotor puertorriqueño de boxeo. Su última pelea oficial había sido el 1° de noviembre de 1975, en el Luna Park, donde venció por puntos en 10 asaltos ante Raúl Gorosito. En esa época era ya casi un trotamundos, porque venía de combatir en Hawai y de hacer una serie de combates en Italia. Su última presentación en los Estados Unidos había sido en 1974, cuando fue derrotado por Ron Lyle en Denver. 




Montano vendió el contrato de Ringo a quien sería una pieza clave en su asesinato: Joe Conforte, un siciliano de 53 años, que llegó a los Estados Unidos cuando tenía once. Primero fue taxista, hasta que descubrió que había negocios más lucrativos. En 1955 se mudó a Nevada, abrió un prostíbulo ilegal y cuando quiso comprar al fiscal del distrito se dio cuenta de que había hecho una jugada equivocada: lo metieron 22 meses en la cárcel. No se dio por vencido. Y aunque estuvo preso dos años y medio por evadir impuestos, logró establecerse de nuevo, esta vez legalmente. Junto a su esposa, Sally Burguess, tomó el control del Mustang Bridge Ranch en el departamento de Storey en 1967. 




El establecimiento se llamaría luego simplemente Mustang Ranch. Uno de los hombres de confianza de Conforte era William Ross Brymer, de 32 años. En su prontuario constaban amenazas a una mujer (1966), posesión de narcóticos (1968) y asalto a mano armada. Era devotamente fiel a su jefe. Tenía un ojo de vidrio, ya que era ciego del ojo derecho. 




Pero el personaje más atractivo era, sin duda, Sally Burguess Conforte. También siciliana, nacionalizada norteamericana, a los 65 era madre de tres hijos. 



Discapacitada de una pierna, con el tiempo pasó a vivir afuera de la fortaleza de Joe, separados así de hecho por causas que nunca trascendieron demasiado. De todos modos y aunque el dueño del establecimiento era Joe, se desprendía que su mujer era también su socia. Nadie hubiera supuesto que esa mujer canosa, regordeta, simpática y en edad de ser abuela, desencadenaría la tragedia.


23|11
 
CONFORTE SONRIE EN LA TAPA DE ROLLING STONE, 72. 
A partir de 1971, el Mustang Ranch fue el primer prostíbulo legal del estado de Nevada y se convirtió en el más grande de todos. Tenía 54 habitaciones. Las mujeres que trabajaban allí también vivían en el establecimiento. Cobraban un promedio de 100 dólares por servicio, pero podían llegar a 500. La casa se quedaba con el 50%. 



Al principio no se aceptaba gente negra pero, con el tiempo, se llegó a abrir una dependencia especial para ellos. El lugar fue famoso desde su comienzo. Conforte, que tenía buenas conexiones con la mafia de San Francisco y también tenía algunos lazos con la Familia Bonanno de Nueva York, no descuidaba detalles. 




De hecho, sus chicas eran revisadas periódicamente por médicos que él contrataba para estar seguro de que no hubiera enfermedades sexuales. También era cuidadoso en organizar “fiestas especiales” para los jugadores fuertes que visitaban los casinos. Un periodista de Las Vegas, Colin McKinlay, llegó a escribir que “Las mujeres eran más hermosas que cualquier fantasía que podía tener un hombre”. 




Entre esas beldades, una sería protagonista de esta historia: Cheryl Anne Rebideaux, conocida como “Daisy”quien, a los 24 años, y luego de haber tenido un romance con Ross Brymer, fue presentada por Sally a Bonavena. Así se acordó un casamiento de conveniencia, para que Oscar tuviera su residencia definitiva en los Estados Unidos. Se casaron el 19 de febrero del 76 ante el juez John Gabrielli. La libreta de casamiento fue enviada al domicilio de los Conforte, en el número 3115 de la Sullivan Lane de Reno. Por razones que nunca fueron aclaradas, ella desapareció poco tiempo después. 





¿Qué hacía Bonavena en el Mustang Ranch?  Allí efectuó solamente una pelea, la del 26 de febrero del 76, cuando le ganó por puntos a Billy Joiner, quien tenía más derrotas que victorias: había perdido con Larry Holmes, Zora Folley, Sonny Liston y Alvin “Blue” Lewis, entre otros. Bonavena quedó desencantado. “Nunca me sentí tan mal en la vida –le contó a su esposa, Dora-: la gente cenaba, se reía y nosotros nos peleábamos; sí, parecía el circo romano. 




Yo no quiero esto, quiero una pelea grande, en serio, no sé qué carajo hago acá”. En esa época, Oscar estaba séptimo en el ranking mundial. Cuando llegó a Reno lo hizo acompañado de un manager, Lorren Cassina, pero cuando este le ofreció una pelea en Albuquerque, Nuevo México, Ringo dijo que no. Cassina se fue y se oficializó el contrato con Sally Conforte. 





Oscar se pasaba gran parte del día junto a Sally Conforte, que era su manager oficial. Se hicieron muy amigos. Demasiado, según el runrún de la ciudad. Ringo y Sally eran vistos públicamente, porque ninguno escondía su relación, que era amistosa según ellos e íntima para los demás. Alguna vez, cuando se efectuó una gran fiesta en el Mustang, Oscar cometió lo que fue un grave error. “Bienvenidos, espero que les guste mi lugar”, les dijo a varios invitados. Cuando se enteró, Conforte fue derecho al grano: “Con mi mujer hacé lo que quieras, pero no te metas en mi negocio”.
Joe no hablaba en broma. 



 
21|1
 
BONAVENA Y SALLY SON LA BESTIA y LA BELLA.
Tras llegar a Reno, y conocer a Conforte, Bonavena se enteró de las novedades. Una, que Conforte no podía figurar como su manager porque había estado cinco años en prisión. La otra, que Sally, la esposa, que andaba por los 65 años, sería su manager. Sally había sufrido un choque automovilístico y, luego de cuatro operaciones, no logró restablecerse del todo. Caminaba dificultosamente y tenía sobrepeso. 




El blanco de su cabello la hacía parecer aún más mayor. Ambos se llevaron bien desde el primer día. Firmaron un contrato por dos años: el boxeador recibió 7.000 dólares en el momento y se comprometió a pagar el 10% de su bolsa a Conforte. Sally, además, le regaló 3 mil dólares de su propio bolsillo. Cuando se anunció la pelea con Joiner, Oscar y Sally posaron para las fotos; en el cartel de publicidad se leía: “La bella y la bestia”.  





En esa época, Oscar estaba acompañado por el argentino Julio Morales, que estaba ligado al ambiente artístico. Primero vivieron en un hotel y luego, por 12.500 dólares Sally compró un trailer que estaba a dos kilómetros del Mustang Ranch.




 Después de su debut en Reno –que fue también su única pelea en esa ciudad–, recibió un contacto telefónico con José María Otero, por entonces corresponsal de El Gráfico en España. Otero, quien comenzaba a incursionar en el negocio del deporte, le ofreció una pelea con el español José Manuel Ibar, “Urtain” –un vasco que arrastraba multitudes-, por una bolsa de 30 mil dólares. Oscar le comunicó la novedad a Conforte, aunque finalmente la pelea no se hizo. “Yo lo acompañaba a todos lados –recuerda su hermano, José, gran compañero de Oscar– y si se hubiera hecho esa pelea, todo habría sido distinto. Todavía hoy no me perdono el no haber estado junto a él”. 





Como Conforte no sabía nada de boxeo –y Sally menos– Oscar comenzó a desplegar sus contactos, buscando peleas. Llegó a tener una oferta para combatir con Alí en Guatemala, por 500 mil dólares, hasta que un terremoto canceló los planes. Se habló de un encuentro con Ken Norton, en Las Vegas o Montecarlo, pero tampoco se concretó. 





Mientras tanto, Ringo, que no tenía mucho para hacer en Reno, comenzó a frecuentar cada día más a Sally, quien pronto mostró un cariño muy especial para ese “chico grande” que la hacía reír todo el tiempo con su simpatía. Se hicieron amigos, muy amigos. Ella se sentía sola porque su marido, diez años menor, siempre estaba ocupado. 





Todo marchaba bien, salvo un detalle que a Conforte no le gustó: todas las propiedades estaban a nombre de Sally ya que él, por sus antecedentes penales, no podía arriesgarse a tenerlas.
Conforte, pues, no vio con buenos ojos la relación de ambos. La tormenta se ceñía sobre el boxeador y su manager. 




 
15|5
 
FIESTA, ALCOHOL Y FURIA EN LA NOCHE DEL MUSTANG RANCH.
La relación entre Joe y Sally se iba resquebrajando muy rápidamente. El comenzó a pasar algunas propiedades a su nombre. Y ella, a respaldarse en Oscar. Los hechos se precipitaron barranca abajo el sábado 15 de mayo, cuando se hizo una gran fiesta para inaugurar el Mustang Ranch 3, al que se sumarían 72 chicas más. 





El lugar incluía máquinas tragamonedas y había que llevar por lo menos 200 dólares para poder entrar. La fiesta fue tomando color a medida que pasaban las horas y corrían las bebidas, proporcionadas con generosidad por Joe. 



Fue entonces cuando, alrededor de las cuatro de la mañana, Bonavena sostuvo una fuerte discusión con Willard Brymer, el guardaespaldas privado de Conforte. El hombre, de gran físico, había llegado a hacer guantes con Ringo. 




Esta vez fue en serio, porque a medida que fueron subiendo de tono las palabras, y seguramente empujados también por la bebida consumida –Oscar nunca fue un hombre de beber demasiado alcohol-, terminaron yéndose a las manos y, como no podía ser de otra manera, Brymer terminó nocaut. Cuando Joe se enteró de esto, decidió prohibirle la entrada a su local a Bonavena. Era la forma más práctica de darle pasaporte a Brymer para hacer lo que quisiera.





Lo primero que hizo Brymer al día siguiente, sábado 16 de mayo, fue ir al trailer de Oscar y destruir todo lo que había. Incluso, le quemó el pasaporte. Era una clarísima señal de que estaban hablando en serio. Julio Morales desapareció y Oscar se recostó en Sally. 




Ella no solo le prometió su total protección: primero, le entregó un revólver calibre 38 y luego se ofreció a viajar con él a San Francisco, para ir al consulado argentino y renovar el documento, cosa que hicieron. El viaje tuvo sus riesgos, porque Sally se vio obligada a pedir protección policial, tras haber recibido algunas llamadas amenazantes. 





Se olfateaba la tragedia. Oscar regresó el miércoles 19 de mayo al Mustang Ranch, a eso de las diez de la noche, “Por supuesto, no lo dejaron entrar –recordó una empleada del lugar, Juanita Restrepo–. Hubo empujones entre él, Brymer y un par de guardias y tuvo que bajar Sally para que la cosa se calmara un poco. Bonavena anunció que el lunes se volvía a Buenos Aires, pero  antes quería la copia de su contrato. Tuve miedo, porque conocía a Brymer y compañía”.  




22|5
 
06.30 hs: RINGO ES FUSILADO. UN BALAZO AL CORAZON.
Nadie sabe por qué Bonavena volvió al Mustang Ranch ese sábado 22 de mayo a las 6 de la mañana. Un viejo periodista de boxeo de Reno nos dijo que lo habían provocado a través de una llamada al Harra’s, donde estaba jugando: “Fue una trampa, Oscar no midió que, si se aparecía por el Mustang Ranch, era cadáver”.
Oscar bajó de su auto y, a los gritos, anunció que iba a entrar de cualquier manera. John Coletti, otro guardaespaldas de Conforte, le pidió que se retirara. 




Fue inútil. Un balazo le destrozó el corazón y allí quedó, en el medio de la calle. Coletti miró a su derecha y ahí estaba Brymer, con el arma a la altura de su cadera. Luego se metió en la cocina y comenzó a comer cereales con leche. “¿Por qué lo hiciste?”, le preguntó un empleado, Jim Peri. “Le dije que se quedara quiero. Metió la mano en la bota, tenía un arma. Entonces le tiré”, fue la respuesta. En verdad, sí se encontró un 38 en la bota derecha de Oscar, lo que no se entiende porque él era zurdo. 





Según el sheriff Bob De Carlo, la muerte se produjo entre las 6.15 y las 6.30 de la mañana y el disparo se efectuó a una distancia de 28 metros. “Bonavena fue asesinado por un arma de alto calibre –recuerda Juan Larena, relator de boxeo de Combate Space, que viajó a Reno enviado por editorial Abril–. Brymer no tenía permiso para portar armas, pero esto era diferente, porque la prohibición no incluía armas de caza. Yo hablé apenas un día después con Conforte.




 'Fui un estúpido, porque lo alojé en mi casa y los traté a él y al otro (Morales) a cuerpo de rey. Lo que empezó a molestarme fue que anduvo diciendo que se iba a quedar con el Mustang Ranch. Al final, le dije que se volviera a la Argentina y le di un pasaje y varios miles de dólares. Le mandé a decir que, si volvía al Mustang, yo no me responsabilizaría por su vida'. Eso fue lo que me dijo Conforte. Hasta nos sacamos una foto juntos”, recuerda Larena.





El arma fue una Remington 30-06. Las balas tenían punta blanda de plomo y podían llegar a una velocidad de mil metros por segundo: al entrar en contacto, el proyectil se deshace en partículas minúsculas. Tal es su peligrosidad que fue prohibida por la Convención de Ginebra. Esa arma, modelo 03 AS, hallada sin huellas digitales, fue la que terminó con la vida de Oscar. 




Fue disparada por Brymer, aunque no sabe si fue desde el techo del establecimiento o desde una de las torres. Pero, eso sí: “Debido al ángulo del tiro, y el hecho de que la bala debió haber pasado entre los barrotes de la puerta a unos ocho centímetros entre uno y otro, las chances eran de una en un millón de que Brymer hubiera matado intencionalmente a Bonavena”, escribió Alberto Oliva, corresponsal de El Gráfico, quien cubrió todos los hechos posteriores a ese trágico 22 de mayo. Brymer dijo que no tuvo intención alguna de matar a Bonavena, sino de ahuyentarlo. Finalmente le dieron dos años de cárcel. Con una fianza de 250 mil dólares, quedó en libertad.




27|6 

BRYMER MUERE. Y CON EL SE VA LO QUE OCURRIO ESA MADRUGADA. 

Sally Conforte murió en 1992. El 27 de junio del 2000, Brymer fue hallado muerto en la casa de un amigo en la Well Avenue, de Reno. Tenía 55 años. Joe Conforte está radicado en Brasil. Oscar Bonavena, Ringo, sigue vivo en el alma de la gente que jamás lo olvidará.

OTRO RECUERDO DE VICTOR GALINDEZ

LA NOCHE DEL 22 DE MAYO DEL 76

En su momento asi definió esa jornada el DIARIO LITORAL, cuyo texto comparto con mis lectores:



Tomás Rodríguez
(Especial para El Litoral)

Hace unos días, el 22 de mayo, se cumplieron 33 años. Víctor Emilio Galíndez, en una histórica pelea sobre el ring del “Rand Stadium” de Johannesburgo, Sudáfrica, derrotó en inolvidable lucha a Richie Kates, por nocaut cuando restaba un segundo para finalizar la pelea y durante la mayor parte de la contienda peleó casi a ciegas, mostrando una guapeza sin par a pesar de manar abundante sangre sobre su rostro, consiguiendo una apoteótica victoria. 



La inolvidable tarde de esa epopeya, el 22 de mayo de 1976, es decir 59 días después del derrocamiento del gobierno constitucional por un golpe militar, iniciando el proceso más negro y de mayor dolor de la historia argentina, con una significativa represión hacia el pueblo, debido especialmente a los secuestros, torturas y muertes de los militantes populares, con aproximadamente 30 mil desaparecidos, Galíndez escribió una página imborrable para el deporte de nuestro país.



Richie Kates estaba precedido de valiosos antecedentes, se encontraba ubicado segundo en el escalafón mundial, ostentando un récord de 31 victorias, 16 antes del límite, con una sola derrota ante Eddie Owens. 



En forma idéntica al argentino, le había ganado a Len Hutchins, José “Monón” González y al ídolo sudafricano Pierre Fourie.



En dicho festival, pagaron entradas 42.195 personas; no hubo transmisión en directo a Estados Unidos; en la Argentina los aficionados adeptos al deporte de los puños siguieron las incidencias en forma directa por Canal 13 de Buenos Aires, con los relatos de Roberto Maidana o la escucharon por medio de LRA 4 Radio Splendid de Buenos Aires.



Ese Galíndez bravo e indomable, con su sangre de guerrero derramada sobre la camisa del árbitro Stanley Christodoulou y un coraje sin par, exigió del prestigioso periodista Ricardo Arias por LRA 4 Radio Splendid uno de los relatos más fabulosos que se hayan escuchado en la radiofonía deportiva de la República Argentina.




Cabe apuntar que nadie hubiese podido imaginar que la pelea iba a ser considerada por los especialistas en boxeo como una de las más dramáticas y sangrientas de toda la historia universal y que, con el mismo final, entraría directamente en la leyenda.




El “Negro” Galíndez había sufrido un corte enorme en su ceja derecha, tras un cabezazo y un golpe de Kates en los primeros capítulos. El estadounidense había evidenciado claras diferencias en la parte inicial y el combate estuvo a punto de ser suspendido varias veces por la sangre que manaba abundantemente de la ceja florecida del argentino por la herida, limpiándose para que no le impidiese la visión en la camisa del árbitro local Stanley Christodoulou.





“Tito” Lectoure empezaba a pedirle a viva voz al juez sudafricano la descalificación del rival de Galíndez, mientras que con su cuerpo evitaba que subiera al cuadrilátero el médico, Clive Noble y comenzaba a trabajar en la herida; mientras, Kate iniciaba el festejo.




Kates, años después, reveló al periodista Carlos Irusta del entonces semanario “El Gráfico” que “fue el corte más grande que vi en mi vida; me di cuenta de que la pelea no podía seguir; observé cómo Galíndez se dio vuelta quejándose del dolor, subiendo el médico al cuadrilátero; entrando entonces en escena Lectoure, quien complicó todo. ¿Quiere saber la única verdad?, Galíndez no quería seguir peleando y ese apasionado hombre del boxeo de su país hizo de todo y él fue el artífice para el éxito del argentino”.




“Tito” Lectoure fue quien le gritó al médico que el árbitro lo autorizaba a Galíndez a seguir peleando; casi al mismo tiempo le explicaba al réferi que el Dr. Noble daba permiso, mientras le hundía los dedos en la herida, impregnándola de un cicatrizante norteamericano.



Juan C. Cuello y Roberto Palmero Galíndez -hermano del campeón-, estaban junto a Lectoure, asistían impotentes al chorro de sangre del que quedarían luego tres toallas ensopadas y ante el estupor de todo el público, el combate continuó, con el argentino que no veía casi nada...




A partir de allí, el encuentro fue otro, porque Galíndez comenzó a atacar a su contrincante como un toro enloquecido. A su vez, Kates tardó un poco en reaccionar, si se tiene en cuenta que el sudafricano estaba seguro de su victoria.




Kates reveló al periodista argentino Irusta que en esa jornada tuvo cuatro rivales: “uno, Galíndez; otro el referí que le permitía al argentino secarse la sangre con su propia camisa; el tercero el público sudafricano, porque soy negro, y el cuarto: yo mismo”.




“Sabía que Galíndez iba ganando; aunque desde mi rincón decían que yo tenía ventajas, en el último capítulo salí a hamacarme, tapándome el mentón con la izquierda para evitar los voleos de derecha que él tiraba. De pronto me encontré con la zurda de él (un gancho), una mano fantasma que salió de la nada”, acotó Kates.




Reconoció el sudafricano que “yo mismo lo había incitado a lanzarla, descuidando mi flanco derecho; por eso le dije que fui rival de mí mismo; me equivoqué tácitamente y Galíndez me puso nocaut faltando un segundo para que finalizara la pelea y el árbitro me dio el out”, aseguró Kates.




El domingo 26 de octubre de 1980, Víctor Emilio Galíndez hizo su debut como acompañante de Antonio Lizeviche en la carrera de Turismo de Carretera que se disputaba en la ciudad de 25 de Mayo, en la provincia de Buenos Aires, abandonando la prueba.



Sorpresivamente, el auto fuera de control de Marcial Feijoo los mató a los dos, cuando el Dodge de Lizeviche había quedado fuera de competencia; mientras piloto y navegante volvían a los boxes caminando al costado del camino, en sentido contrario al de los autos.




Galíndez tenía 31 años de edad, nada más, le faltaban siete días para cumplir uno más de existencia, cuando la muerte se le vino encima tan de repente. 



Si su principal virtud era, precisamente, su fortaleza, su mayor debilidad eran los autos, las mujeres y las gaseosas. Entre 1974 y 1980, se dio todos los gustos: cambió 21 veces de rodado. 



En esos años vivió tanto de día como de noche, siempre rodeado de las mejores compañías femeninas, imantadas por su fama, el dinero y su simpatía y alegría personal. 



El problema era su sed. Galíndez ardía por dentro, siempre quería tomar algo fresco. Una vez, en 1978, Víctor y Guillermo Vilas coincidieron en la apertura de un boliche bailable en Bariloche. 



El famoso tenista marplatense, quien revolucionó e hizo popular al tenis en la Argentina, fanático del boxeo, quiso aproximarse al campeón del mundo para conversar un rato, pero era tanta la gente que lo rodeaba y se sacaba fotos con él, que optó por dejarle un mensaje seco, lacónico. Decía: “Gordo, largá la gaseosa que te está matando...”.





Cuando Galíndez llegó al vestuario, tras la conquista obtenida, le limpiaron las heridas y el natural de Vedia aguantó sin emitir un grito de dolor cuando le aplicaron en la ceja afectada siete puntos de sutura sin anestesia.



A su término, el equipo que lo acompañaba al campeón dirigido por “Tito” Lectoure e integrado por el técnico Juan Carlos Cuello, el profesor Russo y el Dr. Paladino, le informaron de la infausta noticia del asesinato de su gran amigo, Oscar Natalio Bonavena, quebrándose Galíndez en un desconsolado llanto -como lo hacen los niños- por la muerte inexplicable de su gran compañero y amigo.




Cuando regresó a la Argentina, Galíndez fue recibido en el aeropuerto internacional de Ezeiza por una multitud que acompañó en caravana al campeón mundial de los semipesados en el trayecto por más de tres horas hasta el mítico Luna Park. En el lugar, Galíndez con lágrimas en sus ojos, muy emocionado, puntualizó que “lamentablemente hemos perdido a un gran amigo, Oscar Natalio Bonavena, por eso les pido a todos ustedes un minuto de silencio en su memoria...”.





Ese mismo día, sábado 22 de mayo de 1976, el boxeo argentino además de la gloria alcanzada en Sudáfrica por Víctor Emilio Galíndez, tuvo una jornada de congoja, abatimiento, tristeza y hondo dolor por la trágica muerte de uno de los más grandes ídolos, Oscar Natalio “Ringo” Bonavena. Mucho lloró Galíndez al enterarse de la noticia.





Cansado y agotado de los entrenamientos, el 14 de junio de 1979 hizo su última pelea: con poco más de 86 kilogramos, perdió con Jesse Burnett en Anaheim, por la faja de peso crucero de la WBC, retirándose de la actividad. Dos meses después, la muerte se le cruzó en el camino, al igual que su amigo e ídolo, “Ringo” Bonavena, el valiente Víctor Emilio Galíndez se bebió la vida de un sorbo. A los 31 años, había ido y había vuelto; no había tenido nada y lo había conseguido todo, despidiéndose muy joven de la vida terrenal.