EL MERCADO DE PASES DEL FÙTBOL ARGENTINO

LAS POBRES RAZONE DE SU MOVIMIENTO


Este es el ARTÌCULO de MARCELO RUSSO en MUNDOD.LAVOZ.COM.AR acerca del POBRE MERCADO DE PASES del FÙTBOL ARGENTINO que aquì transcribo para mis lectores:

• Bajo nivel

La forma en que se juegan los partidos del fútbol argentino hicieron perder el entusiasmo de otros tiempos. El motivo es sencillo: ayudado por planteos especulativos de los entrenadores, el nivel de los futbolistas ha caído y la tendencia indica que cada vez se juegue peor. Por eso, los clubes extranjeros ven cada vez con menos interés al fútbol local para poder comprar algún jugador.

• Paridad o competitividad interna

A la par del punto anterior, el hecho de que en Argentina se juegue cada vez peor, también hace que se achique la brecha entre las diferentes categorías del fútbol argentino. Así, algunos clubes de Primera División buscan reforzarse con jugadores que militan en categorías inferiores. Por eso, al principio, los nombres no seducen demasiado.

• Situación económica

Salvo contadas excepciones, entre las que se encuentra Belgrano, la mala administración de los clubes hace que se vea común la existencia de deudas millonarias a diferentes acreedores, con sueldos a jugadores incluidos. Así, los endeudados clubes carecen de recursos como para gastarlos en refuerzos. Y si se suma la devaluación del peso (el dólar paralelo superó los 12 pesos), muchos jugadores eligen destinos donde se cobre en la moneda estadounidense.

• Mercado disparatado

Así como un equilibrio entre la oferta y la demanda, el valor de un futbolista termina siendo el que se paga por él. Pero en este mercado hay un caso típico de las alocadas cifras que se manejan: ante el interés de San Lorenzo y otros equipos por César Pereyra, Belgrano tasó a su goleador en 7 millones de dólares, una cifra exagerada para un jugador de 32 años (hace medio año, el español David Villa pasó del Barcelona al Atlético de Madrid en 5 millones de euros).

• Consagrados sin identidad

En el fútbol argentino parece haberse terminado la ola de jugadores consagrados que retornaban al país para terminar sus carreras y, de esa manera, prestigiaban con su nivel los torneos locales. Ya no hay casos como los de Juan Sebastián Verón (cuando volvió a Estudiantes) y Juan Román Riquelme (a Boca) hace unos años, o los más recientes de “Maxi” Rodríguez, Gabriel Heinze y “Nacho” Scocco a Newell’s.