El de Bernardo Larroudé, provincia de La Pampa, firmó su contrato con los de Stamford Bridge la semana pasada por seis años, a cambio de 18 millones de dólares, además de bonos en conceptos de objetivos. Sin embargo, se quedará un año a préstamo en el azul y oro aunque los ingleses tienen una cláusula para repescarlo a los seis meses.
La idea del cuerpo técnico de Boca es empezar a darle mucho rodaje al zaguero e incluso lo imaginan como titular junto a Marcos Rojo, pero primero deberá dejar a trás las dolencias físicas. En abril, ante Sportivo Trinidense, sufrió un desgarro en el isquiotibial de la pierna derecha y cuando volvió a jugar en junio frente a Vélez, salió de la cancha llorando por haberse resentido. Desde entonces trabaja en su regreso.
Con esta venta, Boca deberá anotar nuevamente al defensor en la lista de la Copa Sudamericana porque ha dejado de pertenecer a la institución. Sin embargo, el defensor por ahora estará disponible para el cruce de octavos ante Cruzeiro que comenzará la semana pasada, aunque todo dependerá de cuándo mande Chelsea el transfer. Tiene tiempo hasta fines de este mes. Una vez presentado esos papeles, ahí sí tendrá que ser inscripto otra vez, aunque Boca tiene la chance de realizar tres cambios en la nómina si avanza a cuartos.
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